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Convocatoria a ocupar plazas de tiempo completo en la UABC: Un ejemplo más de comunicación, transparencia y participación

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El pasado 12 de mayo apareció en el diario electrónico Monitor Económico una nota titulada Abrió UABC convocatoria para profesores de tiempo completo.  Dada la relevancia que la contratación de académicos de tiempo completo tiene para cualquier universidad, buscamos la convocatoria en el portal de la UABC, pero sin suerte, ya que para ese momento no había ninguna información de una convocatoria que había sido emitida el viernes 9 de mayo y publicada en el sitio http://www.uabc.mx/plazasvacantes/.

En dicha convocatoria para ocupar 46 plazas la UABC, “como parte del proceso de renovación generacional de la planta docente, convoca a profesionistas interesados en formar parte de una institución pública estatal de educación superior, líder y de reconocida calidad nacional, a participar en el proceso para ocupar plazas de Profesores de Tiempo Completo “vacantes por jubilación”, en unidades académicas de los diferentes campus de la Universidad Autónoma de Baja California, a partir del periodo 2014-2.”

Prosigue la convocatoria: “Con fundamento en los artículos 156, 157 y 158 del Estatuto General de UABC, y artículo 78 del Estatuto del Personal Académico, se emite la siguiente convocatoria para ocupar plazas de profesores de tiempo completo.”

Además de especificar los requisitos que deben cumplir los interesados a ser considerados como candidatos “a ocupar las plazas,” la convocatoria describe el siguiente “Calendario de actividades: (a) Confirmación por correo,  por parte de los interesados, de su participación en el proceso de selección, del 12 al 23 de mayo 2014; (b) Notificación a los interesados vía correo electrónico, del lugar y horario de la entrevista, el 27 de mayo de 2014; (c) Entrevistas, del 2 al 6 de junio de 2014; (d) Comunicación a los candidatos a ocupar las plazas, vía correo electrónico del 16 al 20 de junio de 2014.”

Finalmente, la convocatoria enlista el salario tabular, por categoría, de los profesores de tiempo completo “que se asignarán de acuerdo al currículum de los candidatos,” y “otros beneficios de pertenecer a esta institución,” entre los que figura en primer lugar el de “un plan de pensiones y jubilaciones garantizado por más de 100 años.”

Son varios las dudas y reflexiones que sobre esta convocatoria merecen plantearse, pero en esta ocasión enunciaré las siguientes:

  • ¿Qué significa “ocupar las plazas”?  En la UABC “el personal académico podrá tener nombramiento definitivo, interino o por contrato de prestación de servicios” (Estatuto General de la UABC, p. 61, Artículo 156).  Dado que la convocatoria no llama a un concurso de oposición, se entiende que ocupar la plaza no significa, entonces, la obtención de “permanencia en su nombramiento” (Estatuto del Personal Académico, p. 29, Artículo 87).  Tampoco parece que “ocupar las plazas” pueda entenderse como la obtención de un nombramiento interino, toda vez que este tipo de nombramiento se otorga a quienes ocupan “una plaza vacante en forma temporal” (EPA, p. 29, Art. 79).  Si, como parece, “ocupar las plazas” significa un nombramiento por contrato de prestación de servicios, ¿por qué no se dice claramente?  Además, ¿por qué no se dice también que en este “caso los nombramientos no podrán exceder del plazo de un año”? (EPA, p. 62, Art. 157).  Finalmente, ¿por qué se enlista como beneficio de pertenecer a la UABC el contar con “plan de pensiones y jubilaciones garantizado por más de 100 años”?, ¿Es este un beneficio que los académicos seleccionados tendrán, automáticamente, al ocupar una plaza en el contexto de esta convocatoria?
  • ¿Por qué, si la incorporación de un profesionista a su cuerpo académico es un proceso central para una universidad, dicho proceso se plantea llevar a cabo, para todas las partes potencialmente involucradas en él, de una manera tan apresurada?, ¿Serán los tiempos estipulados en la convocatoria adecuado para que los académicos de la UABC, y los externos a ella (puesto que la convocatoria no especifica nada al respecto) se enteren y tomen una decisión sobre si participar o no?, ¿No sería lo deseable que la mayor cantidad de solicitantes potenciales se enteraran de esta convocatoria, ya que con ello aumentaría la posibilidad de que los participantes tuvieran un mejor perfil?  Si se está en el final de un semestre, ¿es éste el mejor momento para que los integrantes de la universidad que vayan a tomar parte en la decisión, se involucren en este proceso tan central para el futuro de la institución?
  • La convocatoria no especifica quiénes tomarán las decisiones en cuanto a la asignación de los nombramientos.  ¿Será un persona; quién?  ¿Será un cuerpo colegiado o un cuerpo formado expresamente para el caso; cuál, quiénes lo conforman?  Una de las características básicas de un cuerpo académico profesionalmente maduro es que participa de una manera decisiva en la contratación de quiénes serán sus futuros colegas.  ¿No es éste el caso del cuerpo académico de la UABC?, ¿No se estará dejando un espacio excesivamente amplio a la discrecionalidad de las autoridades de la universidad?  ¿Será que nuestras autoridades saben de todo y no tienen ningún interés particular que interfiera con el juicio que ellas hagan en un proceso tan delicado.
  • Si la convocatoria fue emitida desde el viernes 9 de mayo, ¿por qué hasta el viernes 16 de mayo se publicó una nota en la sección de noticias del portal de la UABC?  ¿Por qué en esa nota se habla de una convocatoria “como parte del proceso de renovación generacional de la planta y para atender necesidades de consolidación académica,” si en la convocatoria correspondiente solamente se menciona un “proceso de renovación generacional de la planta docente”?, ¿Será que la nota del viernes 16 está hablando de la convocatoria para 130 plazas de nueva creación que salió publicada en Reforma y en La Crónica el domingo 18 de este mes, y que también está disponible en la dirección http://www.uabc.mx/plazasvacantesnc/?

La contratación de personal académico de tiempo completo es, para algunos estudiosos de la educación superior, uno de los factores más importantes para el presente, pero sobre todo para el futuro de una universidad.  La contratación de los académicos en estos momentos determinará la calidad de la institución, mínimamente, durante los próximos 30 años.  ¿Qué tan prudente es que sean nuestras autoridades, exclusivamente, las que decidan sobre 176 (¿o sólo 130?) nuevos académicos de tiempo completo?

Nota completa en el Observatorio Académico Universitario

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