No podemos negar que vivimos en uno de los países más desiguales del mundo y que nos ha resultado muy complicado evitar que la educación que se ofrece a la población mexicana deje de reflejar ese hecho, señaló la consejera presidenta del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Sylvia Schmelkes del Valle, al participar en la sesión inaugural del Seminario Permanente de Desigualdad Socioeconómica, organizado por El Colegio de México.
Con este seminario se da inicio a un análisis serio y crítico de un asunto que “desde mi punto de vista” constituye el mayor problema del sistema educativo mexicano: su desigualdad, subrayó. También desatacó que el servicio educativo ha llegado siempre al último a las zonas más pobres, más dispersas y culturalmente más distantes de la cultura nacional dominante.
Se ha llegado a los niños, niñas y adolescentes que viven en esas condiciones con un servicio empobrecido, a juzgar por las diferencias en la infraestructura y el equipamiento de las escuelas, en la formación de los docentes, en el funcionamiento cotidiano de las escuelas y en el apoyo que reciben los supervisores, precisó la titular del INEE.
Dijo que la educación es la mejor inversión en el futuro, y que en la medida en que se distribuya de forma justa y equitativa, se convierte también, en el mediano plazo, en el igualador social por excelencia, por eso es tan importante distribuir bien una educación de calidad.
La titular de este organismo autónomo resaltó la necesidad de asegurar una mayor inversión en infraestructura, equipamiento y formación de los docentes, para que repercuta en una práctica docente enriquecida y relevante, en una gestión escolar efectiva y en una mucho mayor participación de padres y comunidades en la escuela de sus hijos.
Finalmente, Schmelkes del Valle informó que los estudios y evaluaciones del INEE están al servicio de este seminario, como un elemento que contribuya al cumplimiento del derecho de todos y todas a una educación de calidad.
