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Simpatía por el diablo

En respuesta a mi artículo del 10 de junio, una persona escribió a mi buzón electrónico criticando mi posición. Me dijo, en resumen, que mi postura no era de incorrección política sino de apoyo descarado al secretario de Educación Pública Emilio Chuayffet, y que yo era un barbero. Revisé mi texto y me convencí de que mi corresponsal no lo leyó bien.

oaxaca_cnte_ine2Dos aclaraciones. Primera, ya había usado el título de este artículo en junio de 2006, donde intentaba explicar —no justificar— la acción del gobernador Ulises Ruiz al tratar de disciplinar a la Sección 22. En aquella ocasión usé la metáfora de los Rolling Stones para juzgar a quienes se consideraban de izquierda y pensaban que lo políticamente correcto era escuchar la retórica de la S22.

Segunda. Voy a pecar de otro desacato político, aunque se pueda pensar que tiro una red para pescar algo.

Hoy la corrección política consiste en lanzarles dardos al secretario Chuayffet y a la SEP. No soy defensor de oficio, pero me parece que él es el pararrayos de una tormenta que se ocasionó en la Secretaría de Gobernación, por mal cálculo político y actitud blandengue.

La suspensión de las fechas de los exámenes para el Servicio Profesional Docente fue un error que desató una oleada de críticas, la mayoría justificadas, por lacónico e inoportuno. Vino la marcha atrás y la crítica fue porque el gobierno, no nada más la Secretaría de Educación Pública, reculó. Pero los exámenes se realizaron en más de un 83% y la censura es porque no se pudo en Oaxaca, ni en Michoacán ni en partes de Chiapas.

A Chuayffet le reprochan la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, el Partido de la Revolución Democrática, un montón de periodistas, Mexicanos Primero y otras agrupaciones y, con particular énfasis, voceros del Partido Acción Nacional. No soy partidario de la teoría de la conspiración, pero ya parece un complot.

Vamos, Ciro Gómez Leyva asegura que el subsecretario Miranda y el secretario Osorio Chong, salvaron la cara de Emilio Chuayffet porque negociaron con la CNTE y calmaron sus ánimos. Pero las pruebas indican lo contrario. Las concesiones que le otorgó la Segob hicieron que la CNTE sólo incrementara sus apetitos y tan no se calmaron que impidieron la evaluación en sus territorios, menos en Guerrero.

Aunque se presta a debate, me parece que en la comparecencia de ayer ante la Comisión Permanente del Congreso, Chuayffet arguyó con solidez que el famosos Comunicado 129 no había violado la Constitución, aunque reconoció que no dio todas las explicaciones. Lo más convincente —a mi juicio— es cuando leyó el oficio de reconciliación —para denominarle de alguna manera— que le mandó la Junta de Gobierno del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación.

En la comparecencia del secretario noté un ánimo de linchamiento por parte de algunos legisladores, más que de solicitud de explicaciones. Vamos una diputada del PRD dijo que se criminalizaba a los maestros y se solidarizó con la CNTE. Como reza el verso de Mick Jagger, hizo santos de pecadores.

chuayffet_senado4Los reclamos del PAN porque la SEP les paga a los maestros que no dan clases en Oaxaca y otras partes y no los despide como manda el artículo 76 de la Ley General del Servicio Profesional Docente, fueron duros. Ignoraron la respuesta que dio el secretario de que los patrones de los maestros son los gobernadores. Y no miraron el artículo 26-A-IV de la Ley de Coordinación Fiscal donde dice que: “Los recursos correspondientes a la nómina a que se refiere el artículo anterior serán pagados, por cuenta y orden de las entidades federativas en su calidad de patrones”.

Si los patrones no lo ordenan, la SEP y Hacienda no pueden hacer descuentos. Tanto los voceros del PAN como los del PRD se cuidaron de tocar, ni con el pétalo de una insinuación, al gobernador —es un decir— de Oaxaca, Gabino Cué, que primero dijo sí, descuénteles y luego que siempre no. La SEP dio a conocer el punto al detalle con horas y minutos.

Aunque hubo voces discordantes, la mayoría está con la Reforma Educativa. Hay coincidencia de su necesidad, pero a nuestros políticos se les va más el tiempo en diatribas que en propuestas razonables. Pienso que ahora lo urgente es ver hacia adelante y llevar a puerto lo que se pueda de la reforma.

No es que sienta simpatía por el diablo; nada más me perturba que la clase política y algunos colegas de la prensa traten a las cabezas como si fueran colas, como dice la canción.

 

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