Los alumnos bonaerenses llevan 13 días sin clases
- Educación Futura
- 23 marzo, 2014
- Global
- ARGENTINA, Educación Básica, Educación Media Superior, HUELGA
Más de 3 millones de párvulos y alumnos de primaria y secundaria aún no han comenzado las clases de este año en las provincias de Buenos Aires, donde viven casi cuatro de cada diez argentinos, y Chubut, en el sur de Argentina. El ciclo lectivo debería haber comenzado el 5 de marzo, pero los niños y adolescentes permanecen en sus casas, mientras los padres que trabajan se las arreglan para cuidarlos. Es lo que los maestros y profesores, peor pagados que en Chile o México y que otros profesionales argentinos, han cumplido este viernes 13 días consecutivos de huelga porque reclaman aumentos salariales para evitar una pérdida de poder adquisitivo en medio de una inflación de 32% anual, pero los gobernadores peronistas de ambas provincias les ofrecen un alza bastante menor. En otras diez provincias también hay huelgas que duran algunos días o unas horas, pero ya han comenzado las clases. Además en cinco distritos se han evitado los paros, pero continúa la negociación salarial de los maestros, que servirá de parámetro para otros sectores que a partir de marzo de cada año pelean por su nómina y que lo harán sobre todo en 2014 después de la devaluación del peso de enero pasado que han elevado la inflación a una de sus cotas más altas dentro de los 11 años de Gobiernos del peronismo kirchnerista.
En Argentina rige una ley que establece que los estudiantes deben recibir por lo menos 180 días de clases anuales. En Buenos Aires y Chubut se complicará el cumplimiento de ese objetivo. Melina Furman, profesora de la Escuela de Educación de la Universidad de San Andrés, considera grave que los niños pierdan 13 días clases y que ellos y sus padres naturalicen el hecho de que la escuela permanezca cerrada. Considera, no obstante, que si media un esfuerzo de docentes y alumnos, se podrán recuperar los contenidos que no aprendieron en las últimas tres semanas. En principio la huelga continuará el martes, después del día no laborable del lunes por el aniversario de golpe de Estado de 1976. El gobernador de Buenos Aires, el kirchnerista moderado Daniel Scioli, ha presentado un recurso de amparo para que la justicia ordenara el inicio de clases. Furman adjudica la responsabilidad del paro tanto a Scioli, precandidato presidencial para las elecciones de 2015, como a los propios maestros.
El gobernador bonaerense, más conservador que el kirchnerismo puro, ofreció públicamente un aumento del 30,9% en dos cuotas. Sin embargo, el líder del principal sindicato de maestros bonaerenses, el kirchnerista Roberto Baradel, presionado por las bases de la oposición de izquierdas, lo rechazó y denunció que solo un quinto de los docentes recibirá esa cifra de incremento, mientras que la mayoría de ellos solo percibirá un 21%. El ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, admitió que “la oferta beneficia más a los sectores más postergados”. A la titular de Economía, Silvina Batakis, docentes le arrojaron un ladrillo en la pierna al salir de una frustrada reunión de negociación el pasado jueves. Mientras tanto, el gobernador de Chubut, Martín Buzzi, que llegó al poder por el peronismo opositor pero después devino kirchnerista, ofrece un 25%. En cambio, en la ciudad autónoma de Buenos Aires y en seis provincias, incluidas Santa Fe y Córdoba, se sellaron acuerdos por incrementos de entre el 25% y el 31%.
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