A una semana de que más de 25 millones de niños de educación básica arranquen un nuevo año escolar, la Secretaría de Educación Pública (SEP) reunirá a los maestros y directivos para que apliquen una autoevaluación del trabajo escolar y califiquen hasta en 56 rasgos su trabajo sobre ausentismo de maestros, suspensión de clases, condiciones de abandono y reprobación escolar y violencia escolar.
Una vez que los propios maestros y directores califiquen su labor, las escuelas de preescolar, primaria y secundaria serán agrupadas en cuatro categorías: sin avance, cierto avance, avance significativo y objetivo logrado.
Entre las acciones de profesores y directivos se prevé gestionar ante instituciones externas medidas para atender casos de pobreza y desnutrición de los alumnos.
Los aspectos que se evaluarán son la normalidad mínima escolar, el ausentismo, la convivencia en la escuela, la mejora en los aprendizajes, el rezago y el abandono escolar, a través de 56 preguntas o rasgos.
Al iniciar hoy la “fase intensiva” de los consejos técnicos en las escuelas, se prepararán las condiciones para el inicio del ciclo escolar 2014-2015, que será el próximo 18 de agosto.
Tras un año de funcionar, la SEP reporta que en 98% de las escuelas operaron de forma regular los consejos técnicos y lo hicieron en “un clima de respeto y armonía”. Pero sólo 84% estableció metas y compromisos, con base en contextos particulares de cada escuela.
Ahora con la “fase intensiva”, la dependencia impulsará un proceso de evaluación, donde la convivencia escolar será lo más explorado.
Los maestros determinarán si de su parte existe un trato respetuoso a los alumnos al corregir sus errores, “sin utilizar apodos, insultos, burlas, gritos, exhibirlos, ignorarlos o marginarlos”.
Con 30 preguntas se valorarán las necesidades de los alumnos para aprender, se identificarán las diferencias de edad, condición sociocultural, religión, capacidades, ritmos de aprendizaje, entre otros.
A fin de atender el rezago o el abandono, cada escuela contará con un “plan de acción emergente para atender casos de estudiantes que dejaron de asistir a la escuela por salud”.
Al mismo tiempo, se incluirán las gestiones para “atender casos de alumnos con problemas de aprendizaje, desnutrición, pobreza extrema o condiciones familiares desfavorables”.
La evaluación planteada en La Ruta de Mejora Escolar, un sistema de gestión para la escuela, pretende que los maestros establezcan espacios para dialogar sobre los problemas de convivencia, tomar decisiones para evitar situaciones de maltrato entre compañeros y proponer medios para mejorar los conflictos. Incluso la forma en que se involucrará a las familias en la prevención de conflictos.
Al medir la normalidad mínima, impulsada desde el año pasado, la SEP pretende que los profesores establezcan si se cumple con los 200 días de clases, si todos los grupos cuentan con maestros, si las actividades se inician de forma puntual, si todos los materiales como libros, bibliotecas y computadoras están disponibles para ser utilizados.
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